Soraya Sáenz de Santamaría, vicepresidenta, ministra de la Presidencia y portavoz del Gobierno, acaba de comunicar que, ante el ataque sufrido por la sede del PP madrileño el pasado viernes, y como medida cautelar, hasta que entre en vigor una reforma legislativa en la que ya están trabajando, queda terminantemente prohibido en el centro de Madrid, cualquier tráfico y transporte de sustancias susceptibles de provocar una explosión, con especial hincapié en las bombonas de butano.
Los repartidores de butano, prosiguió, serán escoltados por miembros de la policía para garantizar el reparto de las bombonas solicitadas en la última semana y se creará una ficha policial de los solicitantes, para asegurar que su uso no será otro más que el indicado, que es para uso doméstico. Pero a partir de la próxima semana se prohibirá cualquier tráfico de bombonas en el centro de la capital.
Según la portavoz del Gobierno, diferentes informes policiales y del Ministerio del Interior, confirman la existencia de posibles células terroristas de Antisistemas que estarían barajando la fabricación de artefactos caseros, para atentar contra las instituciones democráticamente elegidas, y que el suceso acaecido el pasado viernes prueba que la medida es adecuada, proporcional y urgente. Ya que las bombonas de butano, son de fácil acceso y proclives a crear gran destrozo.
Igualmente la vicepresidenta Soraya Sáenz, ha aprovechado la ocasión para criticar y culpar al populismo de Podemos y a la complicidad de los Medios de Comunicación, en el desagradable incidente del coche empotrado contra la sede nacional del PP. Afirmando que: “Han demostrado que quieren incitar a la ciudadanía contra el gobierno, probando así que no son más que comunistas, proetarras y bolivarianos, sin respeto por la Democracia, ya que quieren usar la violencia, como hicieron los nazis, para desocupar del poder a los gobernantes legítimos y elegidos democráticamente por el pueblo español. Pero no lo van a tener fácil, porque nosotros, el PP y todos sus militantes, representamos la verdadera cara de los demócratas y no cejaremos un ápice en forzar el cumplimiento de la ley y en llevar a los instigadores frente a los tribunales.”
Aunque no se ha atrevido a ponerlo en palabras, se ha dejado filtrar a los medios de comunicación que el Gobierno, a pesar de que el perturbado que chocó su coche no parece estar ligado a ninguna organización, está barajando hipótesis que apuntan al nuevo partido emergente, Podemos, como causante último, y que una vez se consigan las pruebas, se va a proceder a su ilegalización, tal y como hicieron con los diferentes grupos políticos que representaban a ETA.
Como era de esperar, la medida ha aumentado la demanda de bombonas de butano en la capital del reino, para esta semana que aún será legal su tráfico. Y ha dejado ver la indignación de muchos madrileños ante una disposición, que muchos califican de absurda y sin fundamento. Ya que en el fondo lo único que hace es criminalizar a toda la población, presuponiendo su posible conversión en terroristas improvisados.